Y sí, claro, tuve que tomarme una, ¿qué iba a hacer? Se ponen ciegos, no paran. Se ríen, orinan, vomitan y hacen estupideces. Y esto no es, ni de lejos, lo peor. Están loquísimos, muy jodidos. Yo ya avisé, no vuelvo más a ese planeta, para la próxima misión que envíen a otro.
Aquí, a Pequín o a Mart, els descontrol després d'unes birres es igual per tothom. Així que els habitants d'altres galàxies es diverteixen igual que els turistes descervellats que arriben a la costa catalana? Ja ho deia el Johnny Rotten: No Future!
ResponderEliminarJulio, genial el relato venido de otro planeta :)
ResponderEliminarY digo yo, los extraterrestres no beben birra???
Ocurre, compañeros, que los hay que habitan lugares de mucha seriedad y recato. Éste, pobre, de no haber estado de paisano, se hubiera persignado con todas sus manos derechas, visto lo visto. Entrevisté a otro, post Sónar, pero estaba demasiado borracho y colocado como para hilar sus impresiones en un relato coherente.
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